A través del proyecto Punta Arena Sostenible, fase II ejecutada entre 2019 y 2021, la Fundación Bahía y Ecosistemas de Colombia buscó fortalecer la educación ambiental, la recuperación del territorio y la generación de cambio de hábitos ambientales positivos que influyeran de manera directa en mejorar la calidad de vida de la comunidad. Para lograr esto, se fortalecieron y se formaron  a las organizaciones locales de base por medio de una estrategia de educación ambiental, en pro de convertirlas en las difusoras y responsables de la sensibilización ambiental en cada uno de los hogares de la comunidad, con la orientación y lineamientos del proyecto.

En 2020, mientras sucedía la pandemia por COVID 19, se realizó una campaña de limpieza liderada y ejecutada por 100 familias voluntarias seleccionadas, las cuales realizaron limpiezas diarias en diferentes sectores de la comunidad mientras eran motivadas con almuerzos obtenidos mediante una alianza con SOS Cartagena. La actividad se realizó durante 6 meses y se donaron 250, 250, 350 y 250 almuerzos respectivamente, además de mercados. Como resultado, se recolectaron 28 toneladas de residuos en total, evitándolas al medio ambiente y al mar.

Para la ejecución de Punta Arena Sostenible se establecieron tres objetivos principales que se desarrollaron en paralelo:

1. Formar a las organizaciones locales e interesadas en lineamientos sobre salud ambiental y conservación del territorio.
2. Formular e implementar plan de acción ambiental participativo para la recuperación del cuerpo de agua menor “la salina” y mejorar la salud ambiental comunitaria.
3. Brindar soporte técnico socio técnico socioambiental y/o económico de liderazgo necesario para la implementación de “acciones sostenibles” en la comunidad, como ecoturismo, aprovechamiento de residuos e intervención artística.

El proyecto Punta Arena Sostenible fase II se realizó desde los meses de marzo a noviembre de 2021 e impactó positivamente a la comunidad de Punta Arena, sobrepasando los resultados esperados por la apropiación de la comunidad a las actividades y objetivos. Trabajamos con 10 organizaciones locales; Consejo Comunitario, Recicladores, Guardia Ambiental, Voluntariado Ambiental, Restaurantes, Hoteles, comunidad en general, niños y jóvenes, Ecoguías y mototaxistas fortaleciendo la educación ambiental en cada una y recalcando la importancia de recuperar y conservar el territorio por medio de distintas estrategias que cada organización y/o persona identifica que puede llevar a cabo.

Con la ayuda de las organizaciones formadas, se adelantó el trabajo para la conservación de La Salina por medio de la estrategia de valoración y apoyo al ecoturismo, buscando la revalorización de este cuerpo de agua y fomentando la visión compartida de su importancia. Se integró a toda la comunidad para que estuviese de acuerdo con esta estrategia de valorización de la ciénaga, resaltando el valor y servicios ecosistémicos que ciénaga y mangle prestan a esta comunidad y al medio ambiente en general. Se realizó un Eco recorrido en bicicleta por toda la isla con ciclistas de Cartagena. Para hacerle frente a esta problemática ambiental y social, se formuló además un plan de acción ambiental para la recuperación y conservación de la ciénaga de la Salina.

Por medio del plan de acción, se realizaron jornadas de sensibilización a la comunidad para la protección del cuerpo de agua y la separación correcta de residuos. Se desarrollaron ocho (8) grandes brigadas de limpieza en Punta Arena (aparte de los esfuerzos continuos de los eco-guías) donde se recogieron 1268.25 kg de residuos.  Con residuos recuperados, se realizó una intervención artística con la cual se logró el desarrollo de cuatro murales utilizando material reciclable con artistas invitados.

El equipo de recicladores se vio impulsado debido a la recolección de residuos reciclables obtenidos en las diferentes actividades de la Fundación Bahía, lo que mostró un gran avance en la cantidad de residuos aprovechables comercializados por estos.

Gracias a las alianzas con la fundación Ecopazífico y el hotel Namaste, se logró la instalación de cuatro (4) estaciones de reciclaje, construidas y ubicadas estratégicamente para mejorar y facilitar la gestión de los residuos y además facilitar la labor de los recicladores, y así aumentar la cantidad de residuos aprovechados. Además, se realizó un taller sobre aprovechamiento de vidrio, teniendo en cuenta que es uno de los residuos más generados en la isla.

Con base al Plan Operativo y a las actividades anteriormente relacionadas se resume a continuación el avance del 100% del proyecto: